sábado, 4 de julio de 2020

Raras pero no invisibles

Nos gusta ver el lado positivo de las cosas, la cara coloreada de la historia. es cómodo ver desde un ángulo y tener las cosas claras. Pero hay más. 
La vida siempre tiene color pero hay matices de tonos, gamas infinitas, combinaciones increíbles.
Pero también hay personas invisibles, raras que no entendemos, que no son como el grupo y que son juzgadas, criticadas, se les da de lado , incluso se comenten injusticias solo por ser diferentes.
Esas personas por su condición de raras suelen callar , y en silencio viven en soledad las injusticias, las desvalorizaciones. Cargan como una culpa o peso ser tan raras. 
Los médicos no saben poner nombre a su padecimiento o diferencia, investigan años tras años cuando encuentran símiles entre personas que son escuchadas y se preocupan por investigar qué les pasa. Pero es lento el poner nombre y mientras tanto sufren la desigualdad, el deshonor , la exclusión, la incomprensión que es lo más doloroso de la enfermedad.
Estas personas aprenden con quienes las quieren que son especiales, que todo el mundo lo es y hayan ahí su refugio. Deben forzosamente hacerse fuertes y lo consiguen pero con mucho sufrimiento.
Intentan ser positivas y tener buenos sentimientos en un mundo muy cruel.
Solo desean que con el tiempo todo avance, las personas evolucionen, tengan contención, comprensión e igualdad de Derechos y sentirse queridas, arropadas, valoradas como cualquier persona estandart. Lo cual siempre es beneficioso para cualquier enfermedad reconocida, con nombre o en investigación.